lunes, 21 de octubre de 2013

Tu mirada inextinguible

Gracias princesa por existir, tan bella y única, ¡Qué te bendiga Dios y las estrellas más bellas, que los reyes traigan inciensos y mirra de los aromas más románticos de toda la tierra, que los trovadores te canten, en homenaje sincero, tu excelsa belleza!

Gracias mujer en tu proceder se han escrito las historias de amor más reales y elocuentes, se han concentrado, además, en tu ademán sincero y dulce cuando me miras, destellos de tu inigualable luz existencial muy plena de tu fulgurante y exquisita pleamar.

Posees los ojos, porque no decírtelo, más lindos que alguien se haya atrevido a soñar, tan lleno de tu alma pura y angelical, por eso pasado el tiempo, no me canso de este amor apasionado, sentidamente ejemplar; nunca, por lo tanto, te dejaré de soñar y de amar.
MILMAYOS

¡Qué hice para merecerte!!!

  Mujer: ¡Qué hice para merecerte, si todo lo que he hecho ha sido para regocijarte con el más intenso amor desenfrenado y febricitante un...