jueves, 13 de noviembre de 2014

La noble ensoñación de siempre pensarla

Vivo a plenitud la noble ensoñación de siempre pensarla y hasta homenajearla hermosamente como nunca antes lo había vivido, entregándote dulces caricias mientras los besos, sintiendo muy juntos los dos del amor el dulce embeleso con gratos presentes hechos de perfumadas rosas blancas y rojas de muy líricos versos, significativos detalles siempre impregnados de romántico estilo, con un amor que por fiel, cálido y eterno no le teme al tiempo ni a los siglos, que pronuncia tu nombre de frente al día o noche con mil y un suspiros.

MILMAYOS

¡Qué hice para merecerte!!!

  Mujer: ¡Qué hice para merecerte, si todo lo que he hecho ha sido para regocijarte con el más intenso amor desenfrenado y febricitante un...