Bien
vale la pena tener presente para superar trabas, desavenencias y hasta
desencuentros con nuestros semejantes en medio de una vida que llevamos siempre
o casi tiempo ¡Urgente!!!.
No
nos da tiempo para las cosas más elementales y sencillas como puede ser hablar
con los abuelos, con los ex-compañeros de estudio, de compartir tiempo de
calidad con la familia en especial los hijos y jugar con nuestra mascota,
pasear por un parque o el vecindario. Poseemos más que nunca un Ego muy grande
y voraz, para todo recurrimos a la bendita competencia y no nos acordamos de la
cooperación y la mancomunidad de esfuerzos. Todos queremos hacerlo como si
fuéramos átomos o islas separadas. Preferimos estar distanciados y desunidos,
olvidando que en la Unión está la fuerza y nuestros grandes héroes se han
muerto pidiendo la unión, pero preferimos ser desobedientes y la
discriminación, racial, religiosa, política, historica y social es lo que
prevalece. Los seres humanos debemos redefinir el valor de la sencillez, la compasión, la
tolerancia, la humildad y el bien común, entre otros importantes valores con
los que construiríamos un mundo mejor, teniendo más que nunca presente el “Ser”
vale más que el “Tener”, se debería cultivar uno como un ser humano que el
estar acumulando y acumulando tantas cosas materiales, no por lo que posea una
persona debemos tratarla mejor y solo tomarla en cuenta por encima de una
persona que al fin y a cabo lleve una
vida muy sencilla.
William
Manz Milmayos