jueves, 18 de junio de 2015

Mujer excelsa y anhelada

Mujer excelsa y anhelada, eres el jardín azul de mi cielo, ... ¡Cielo tú sabes que tanto te quiero!, que nada para mí es tan sublime y sincero, como los besos del amor que te doy desde mis más apasionados sueños.
Vivo lleno del fervor romántico que nace de lo febricitante y hondo de mi alma y de la pasión que hay en el Edén desde donde te dedico, a cada instante, todos ellos.
Vivo romántico el fervor, mágico efluvio del amor surtidor de lo dulce y extasiado desde donde nacen a raudales siempre, siempre todos mis empeños.
Besos, que se llevan para siempre en la piel y que no se olvidan portadores dichosos de una infinita humanidad de perennes afectos y de la magnitud muy amorosa de todos mis senderos, siempre en el calor de mis sentidos versos te expresaré con muy noble afán la real ensoñación de todos mis anhelos.

MILMAYOS

Mujer eres la felicidad de mi ser


Nada te borra de la felicidad de mi ser
Nada es acariciante y sublime como tú, mujer
Nada logra extinguir tu sabor a miel
en mi alma, en mis versos y en mi amor tan fiel.

Nada como un beso en tu dulce vergel
Nada es de tu esencia de armonías diáfanas, mujer
Nada sin tí es del amor y de la poesia
sin tu majestad y presencia en los jardines y los días.

MILMAYOS

¡Qué hice para merecerte!!!

  Mujer: ¡Qué hice para merecerte, si todo lo que he hecho ha sido para regocijarte con el más intenso amor desenfrenado y febricitante un...