viernes, 24 de junio de 2016

La breve eternidad de un beso

Siempre en la breve eternidad de un beso, ... vive mi afán, mi amor y de mi todo lo bueno. Siempre he querido prolongar en mi corazón tus besos, para que susciten el amor eterno, el afán, la dulzura y el idioma de los cerezos, que nuestras vidas hablen del Edén de una inmensidad infinita cuando por sublime amor, hacemos eso. Inmersos en la dicha, en la magia cálida y entonces el mundo para nosotros se vuelve estrecho.
Siempre he querido prolongar tus besos para sostenerme en la extensión más inigualable del sosiego, en el paraíso de los sueños vueltos realidad, en ese empecinamiento por volverte a besar, esa dicha perpetua que anida en lo maravilloso de todo los nuestro.

MILMAYOS

¡Qué hice para merecerte!!!

  Mujer: ¡Qué hice para merecerte, si todo lo que he hecho ha sido para regocijarte con el más intenso amor desenfrenado y febricitante un...