Tu dulzura apasionada

Mujer:
En este día en que se celebra el día de la bondad, reconozco que no hay nadie como tú que la sepas practicar, no hay nadie como tú que la tenga tan presente, a cada respirar, a cada instante, a cada paso que da. Por eso y por mucho más, por tu forma de amarme y de besar, por tu forma de ser y también de estar, por tu dulzura apasionada, tu forma de emprender y de soñar, siempre, siempre, yo te voy a amar.
Atte.
MILMAYOS

Mi afán en ti

 

Mujer:
Vive despacio mi afán en tí, en los besos que te doy y que amorosos recorren tu sentir, en la paz que nuestras miradas jamás dejarán de tener y de aplaudir. Vives en la exactitud inquebrantable de mi afán y de mi amor, él que siempre fluye como un manantial de intensos suspiros por tí, en cada caricia anhelada y sentida por tu ser, en cada latido de este amor mil veces inmortal y pronunciado por tí, ... mujer. Eres la exhalación inmortal que pervive en el fulgor de los astros y en un rubí
Siempre atento y para tí:
MILMAYOS

belleza y hermosura,

Mujer:
Eres de la más excelsa belleza y hermosura, en tí vive el perfume de las rosas más bellas y el fulgor de la preciosidad en su forma más exuberante y pura, hay en tí un inigualable manto celeste cubierto de estrellas y el inolvidable señorío de la luna.
Tuyo,
MILMAYOS

El mágico poema

Mujer:
Alma de Dios, eres el mágico poema que en las rosas más hermosas escribió el amor, el día que te confesaba entre versos muy románticos, toda mi pasión, a unos pasos de la ruta que pincelaba con almendras y caracolas de la arena de playa, el contenido eterno de lo que te declaraba, para siempre mi corazón.
Tuyo,
MILMAYOS

Las rosas

Mujer:

Gracias por tu amoroso existir:

Que todas las rosas que encuentres en tu camino te hagan acordar a las que yo con tanto amor te entregue a ti, que la caricia de la brisa en las mañanas, te haga encontrar los secretos que te han hecho conmigo tan feliz.

Gracias princesa por tu amoroso vivir:

Le pido a Dios que te cuide, que por donde pases la primavera sea contigo permanentemente el ir y el venir, que recuerdes los amorosos poemas que te hice, esos poemas que sé que te traerán de vuelta, siempre aquí.

MILMAYOS

La reluciente aurora

Mujer;

Te canta la reluciente aurora y la mañana entera con su hermoso fulgor.

También las rosas, los geranios, los lirios y los alegres pájaros con su formidable dulzor.

Te cantan los colibríes mañaneros, la suave y clara brisa y mi apasionado corazón.

Te canta mi alma, su sublime adagio a toda hora expresado a tus oídos, solo con mi voz.

Tuyo,
Milmayos

un perfecto tesoro

  

Mujer:
Eres un perfecto tesoro de la más linda humanidad, eres el principio activo de la gracia, la alegría y la bondad, llenar tu vida de sueños y muy juntos hacerlos realidad, es lo que siempre, amada mía, con todo el ahínco de mi vida, yo quiero lograr.
tuyo.
MILMAYOS

tú sonreír

Mujer:
¿Sabes? ... tú sonreír me motiva con los efluvios más dulce de la vida, tú esplendida manera de Ser me fascina y me hace ver de cerca las vecindades de mis sueños y los tuyos, tus ademanes tan amables me hacen siempre valorar tus encantos y yo muy enamorado llego a admirarte siempre más y más, ... ¡vida mía!.

MILMAYOS

Eres un Ser hermoso

Mujer:
Eres un Ser hermoso como no hay otro en este mundo, profesas con nobleza y pundonor el amor más profundo. Siempre te he de amar, amor mío, casi que perdidamente, con la voluntad de darte toda la felicidad, lleno de detalles románticos y todo la pasión que mi corazón por ti siente.
MILMAYOS

Se te quiere con el alma

 

Mujer:
Se te quiere con el alma y también con el corazón. Se te quiere así porque te mereces todo el amor.

Tú me traes la calma y me das también tu compresión. Eres la protagonista de nuestra historia plena de pasión

Eres el redil de mi dicha, sin ti no sería el que soy, el hombre que en cada detalle, te obsequia una flor.

El hombre que en cada detalle te da su amorosa admiración, el que te amará para siempre, con atenta dedicación.
Milmayos

mi mundo

  

Mujer:

Mi bella, mi mundo, mi flor, en tu Ser he sembrado con un muy noble y apasionado denuedo, el anhelo enamorado de mis ansias, junto a las fuerzas que mueven los incansables émbolos primordiales de mi agitado corazón, para que amorosamente sientas, lo que tú significa para mí; tú, mi felicidad; tú, mi excelso florilegio y los muy importantes motivos que hacen crecer, día a día, nuestro abundante y muy espléndido amor.

tuyo,,

las rosas

Mujer:
Te bendigan las rosas y las gaviotas en su vuelo, te bendigan mis poemas hechos de todos mis anhelos. Muy juntos, los dos aromaríamos con jardines y flores, el mismo azul del cielo.

Te bendiga mi amor y todos mis "te quiero". Te bendigan mis besos y la plácida luz que emanan al mirarte, mis ojos, y también los motivos de ¿por qué? yo tanto, a ti, te adoro.
,
Para mí, mujer de amor, tú vales mucho más que toda la extensión del oro. Mujer de mi corazón, tan hecha de nardos, de inocentes coleópteros, de emociones felices, sin fáciles enojos.
Tuyo,
Milmayos

El designio de tus rosas

Mujer:

En el designio de tus rosas está tu regazo más mío, en el designio de los amaneceres están tus mares, mis caracolas y los ríos.

En el designio de mis más cálidos poemas, están tus ojos amables que miran con enfervorecido amor, muy apacibles, los míos

En el designo de mi felicidad están tus labios amorosos y lindos. En cada trémulo florilegio, todos nuestros besos unidos.

En cada tórrido abrigo que nos damos no vuelve más el frío, este incansable amor crece, se sembró eterno, en el tuyo y en el mío.
Tuyo,
MILMAYOS

Darte un beso

Mujer.

Nada mejor en esta vida que darte un beso, me atrapan todas las dulzuras y el más cabal embeleso, me agrada tanto, no lo oculto, darte mil y un besos juntos a los abrazos, por cada amoroso, firme y noble sentimiento.

Nada se parece al embellecimiento que vive el mundo en esos apasionados momentos, preludio de todo el amor que te doy y que me das, desde el caudal de todas nuestras ansias y muy inolvidables acurrucamientos.

Tuyo,

MILMAYOS