A cada ennoblecido latido

El que ama inmensamente, todo lo soporta. Al cielo, lo mejor para su amor implora y en la ausencia de lo amado en su corazón cuenta con esmerada devoción a cada ennoblecido latido, los suspiros, los minutos y las horas.

MILMAYOS

Vives en mi ser

Vives enteramente en mi ser, te llevo como un talismán en mi corazón y en mi piel, por tí hago dulces poemas, plenos de enamoradas y románticas reverencias, para tu ennoblecida majestad, los hago porque mucho te quiero amar, cálida e inmensamente de aquí a la eternidad.

MILMAYOS

Dulce amada

Dulce amada:

Siempre estás en lo profundo de mi alma y en la flama resplandeciente de mi enamorado corazón, siempre plena como una imborrable y muy romántica canción, siempre inmensa en el fuego ardiente de esta inextinguible e incansable pasión, siempre inspirando con tu perfume al claro sol, en la plenitud de los días y a la luz del romanticismo tórrido de la luna, en la nocturnidad serena de la más armoniosa y serena unión. Mujer, impostergablemente, eres y serás mi inseparable e irrepetible, ... gran amor.

Tuyo, hasta más allá de la perennidad que tiene el amor.

MILMAYOS

Cuando pronuncio la dulzura que posee tu nombre

Te ama siempre apasionado mi gran amor, en definitiva un sublime e inmarchitable ahínco tan vehemente y puro como en una amorosa serenata, la más romántica e inmejorable canción.

Mi amor por tí, ese mismo que cuelga rosales en flor en torno a los hermosos momentos, ... cuando nos vemos los dos, ... cuando pronuncio la dulzura que posee tu nombre con el preludio emocionado de mi voz.

MILMAYOS

Carta para mi amada

Amada mía:

Eres la hermosa luna que hace más romántica la infinitud de la noche ... también sin proponértelo, una inmensa corte de estrellas que le da felicidad con sublime dicha a toda mi vida.

Eres lo maravilloso del día, todo un inmenso sol de bondad que me trae en ramilletes tu alegría, a cada paso de las horas en mil besos y centenares de detalles, afectos y armonías.

Tuyo para siempre

MILMAYOS

Amor es poesía

Amada, tu singular dulzura acampa conmigo en los predios más intensos de mi poesía emocionada para tí, siempre la resguardo en los ensimismados instantes del más desmesurado y sublime amor, ese romance y esa indeclinable pasión jamás sentido por alguien tan enamorado.

Amada tu clara y afable naturaleza atesoro con firmeza en cada romántico segundo de mi existir, ... en cada hondo suspiro de mi frenesí y de mi vivir, ... en cada mirada dulce que tú me haces con regia majestad, cuando te asomas por tus hermosos ojos a mí sentir.

MILMAYOS

Inmenso manantial de belleza

Cada infinito instante del día y de la noche, nacen de tu muy profundo amor los hermosos motivos para mi felicidad ... siempre gracias a tí y al fervor amoroso que mana por entero de tu inigualable ser, inmenso manantial de belleza y de excelso candor, bella mujer.

Eres mi motivación en alto para sembrar la piel de tus sueños con románticas poesías en los predios comprometidos de tu exuberante y mágica existencia, nunca desligada de nuestro romance y de nuestra pasión, esa combinación armoniosa que tú exhalas con solo mirarme, mujer de todo mi amor.

MILMAYOS