Tan solo a mi se me ocurrió
sentenciar ese amor como un embuste,
si me era dado a chorros todos los días.
con sutil delicadeza y sazonado con su
dulce piel de cereza, con todos los
trópicos sembrados en el arcoiris de sus
ojos, con todos los rugidos de una
dulce selva que habita en la cabellera
negra incrustadas con tanta inmensidad.
Era su voz de arrullos y cristales y
boca de manzana la que agitaba
el amor de las plantas y los animales.
Ella tenía aroma a exótica mujer ,
y la voluntad de rocas brillantes que
robaba a la noche su intensidad
desnudándola de sus encantos
devolviéndoselos tan solo cuando
inocente movía tus párpados,
mi ánimo saturadode bondad
sentenciaba casi sin poderlo
evitar que la perdería si
dejaba de tratarla con dulce
amistad casta pero me equivoqué.
Ella quería mi amor y yo no la supé
comprender, pensó que nunca sería
para ella mi corazón y me dijo adiós.
Ningún amor para ser
insigne como el suyo por el mío.
Ramillete de cielo,
luz de explosión inimaginable.
El tiempo que quieras que te esperes.
Desde donde quiera que te hallé
esperándote estaré
ya sin mi ceguera y
y si mi antiguo temor a perderla,
sin tenerla.
MILMAYOS
sin tenerla.
MILMAYOS
EXQUISITO, ESPLENDIDO ,EXCELENTE ME QUEDO SIN PALABRAS PARA DESCRIBIR TAN MAGESTUOSA POESIA,ESTA TU FIEL LECTORA MILMAYOS CON INMENSA ADMIRACIÓN TE HACE ENTREGA DE UNA EFUSIVA FELICITACIÓN...
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